Calendario

Calendario completo del primer equipo de fútbol, RM Castilla y primer equipo de baloncesto. Hora de Madrid. Se irá actualizando a medida que se conozcan las fechas y horas exactas.

sábado, 31 de octubre de 2009

La vuelta de Michel al Santiago Bernabéu


Trece años después, el mejor interior derecho de la historia del fútbol, don José Miguel González Martín del Campo, Michel (ver foto) regresaba a la que fue su casa durante tantos años. El gran Michel venía con la complicada misión de intentar ganar al equipo de sus amores en una época bastante mala para el madridismo, pero como bien ha dicho en varias ruedas de prensa anteriores al partido, él sólo quería demostrar que seguía rigiéndose por los valores aprendidos en el club de Chamartín: intentar ganar jugando al fútbol, sin menospreciar al contrario y haciéndolo todo de la forma más correcta y elegante posible. Así que "chapeau".

Debería haber sido una fiesta, pero entre que el madridismo está para pocas historias tras los descalabros de Champions y Copa (sí, perder en el Bernabéu contra este Milán lo considero un descalabro) y entre que Mateu Lahoz ha hecho todos los méritos posibles para medrar ante Villar y compañía, el encuentro, a pesar de la victoria, nos ha dejado un pequeño mal sabor de boca (hablando de árbitros y Villar, en la primera parte del Osasuna - Barcelona ya han sacado los pañuelos en Pamplona, vamos que blanco y en botella...)

Pero vayamos por partes (y no me refiero a ningún tipo de integración matemática). Parece ser que Pellegrini ha reaccionado cuando se ha visto con la soga al cuello y ha planteado el partido con más lógica que los anteriores. Marcelo ha jugado de interior izquierdo, teniendo por detrás de él, en el lateral, a Arbeloa. Así se daba más consistencia al centro del campo, ocupando la banda izquierda. La pregunta es, ¿por qué no ocupar la derecha? Pero bueno, poco a poco.

Se veía un equipo más equilibrado. Lass y Alonso no se estorbaban, posiblemente porque el francés tenía que ocupar el lado derecho. Ramos seguía subiendo para arriba sin orden ni concierto, pero Lass estaba perfecto en las coberturas, por lo que defensivamente el equipo respondía. Sin embargo algo fallaba, porque los goles no llegaban.

El Bernabéu no iba a ser clemente con el equipo (bueno, ni clemente ni aragonés, por supuesto) eso estaba claro. No se puede pedir paciencia a una afición que acaba de tragarse un 4-0 frente a un Segunda B. El público comenzaba a tomarla con Ramos... Hace unos años, cuando fichamos al defensa sevillano, comenté: "cuidado, es muy bueno, pero lo están volviendo loco". Y me temo que es lo que está sucediendo. En el Real Madrid lo han utilizado de central, de lateral, de extremo y de medio-centro, cuando lo que hay que hacer con un futbolista joven es afianzarlo en un puesto. Es importante reconducir a este jugador, porque su potencial es enorme, pero Pellegrini sigue usándolo para toda la banda y, Roberto Carlos, sólo ha habido uno.

Así las cosas, el partido estaba en el punto que más convenía a los de Michel. El respetable comenzaba a alborotarse y el Getafe no padecía apuros en defensa. Benzemá, mejor que otros días, tenía el punto de mira descolocado e Higuaín, que jugaba como otro delantero más (no en banda derecha como algún listo se ha apresurado a decir en la prensa) no conseguía buenas posiciones en ataque. Kaká cada día dista más de ser Zidane y los delanteros lo notan. A un media-punta de su clase se le debe exigir que, cada vez que tenga el balón, escoja la mejor opción de pase, pero es que no suelta la pelota, hasta el punto que sus compañeros han llegado a exasperarse cuando Arbeloa subía completamente solo por banda izquierda en lo que podría haber sido una ocasión clarísima de gol y Kaká no lo ha visto. No sé qué le pasa, pero se le fichó para desatascar el juego ofensivo, no para quedarse el esférico para él.

Lo que no ha sido para nada ocasión manifiesta de gol ha sido la jugada de la expulsión. Como he dicho antes, el partido estaba en el mejor momento para los visitantes. Con futbolistas de la clase de Parejo y Pedro León, unidos a la capacidad rematadora del tonto Soldado (sí, porque hay que ser tonto para ser expulsado del Real Madrid por no entrenar) podían hacernos la Pascua en cualquier momento. El público encrespado y aburrido, los futbolistas que comenzaban a fallar más de la cuenta y, de golpe y porrazo, la roja directa.

Hoy se ha demostrado algo que vengo sospechando desde hace tiempo: los árbitros de primera división jamás han jugado al fútbol. Absolutamente todo el mundo está de acuerdo en que la acción de Albiol sobre Soldado no evita una ocasión manifiesta de gol. Entiendo que alguien no versado en asuntos futbolísticos crea que, simplemente por ser el último defensa, Albiol merezca la expulsión. Pero un árbitro, como mínimo, debería saberse el reglamento y eso no es así: además de ser el último, debe tratarse de una clara ocasión de gol. Soldado de espaldas a portería, pugnando por ganar la posición con Albiol, balón en el aire, fuerte y difícil de controlar... Hombre, si se tratara de Raúl, como el genio que es puede convertir cualquier cosa en ocasión manifiesta de gol, pero no es el caso, ¿verdad? Sólo por esa acción, el árbitro merece la nevera, pero es que ha habido muchas más: penaltis no pitados, faltas al borde del área con el tipo a escasos tres metros que ha dejado seguir, entradas muy fuertes perdonadas para demostrar que el criterio a seguir es distinto en función del equipo... Ha habido un entradón sobre Van der Vaart con el linier encima, en el que no han señalado ni falta, que es sintomático de que no son errores arbitrales, sino una consigna estipulada de antemano. Y esto no es forofismo, señores, es la realidad de la federación más adulterada de la historia.

Sin embargo, el tiro les ha salido por la culata. Con un hombre menos, el público del Bernabéu, a quien le encanta eso de ir a por la heroica, ha cambiado su actitud y ha comenzado a presionar. De hecho han llevado en volandas a los jugadores, que han salido en la segunda mitad en plan arrollador, sin importarles jugar con uno menos.

Decía Helenio Herrera que al fútbol se juega mejor con diez que con once. El Real Madrid de esta tarde sí. ¿Por qué? Ramos se ha colocado como central, Arbeloa ha ido al lateral derecho, Marcelo ha retrasado su posición y, salvo un par de errores concretos, la defensa ha mejorado bastante. Ramos ya no estaba perdido, pues era su ámbito natural (central) y esa solidez atrás ha provocado que los de arriba estuvieran más tranquilos.

Y cómo no, para repetir la historia de la temporada pasada, ha sido Higuaín el héroe del partido. Dos jugadas a la contra, una con un remate sensacional con la zurda, dando efecto al balón con el interior y otra con la derecha, batiendo al meta rival por bajo. 2-0 y partido resuelto.

Pare que el Real Madrid no tendrá pesadillas en la noche de Halloween ya que esta victoria sirve para calmar un poco los ánimos. El planteamiento ha sido mejor que otros días, pero Pellegrini debería explicar por qué se renuncia a la banda derecha. ¿Qué pasa con los entrenadores que llegan al Real Madrid? ¿Por qué esa manía de renunciar a las bandas? Lo hace Pellegrini, lo hicieron Schuster y Juande con esa manía de jugar con los extremos cambiados y Capello, directamente, ni se enteraba de lo que hacía (ya sé que el hereje que se cargó a Michel tiene sus seguidores por ganar aquella liga, pero nadie entiende que ese torneo cayera del lado madridista, por algo será). Recuerdo al Pellegrini del Villarreal y no renunció jamás a las bandas. Puede que no tuviera jugadores específicos, pero siempre las ocupaba (fijáos si no la importancia que tuvieron Pires y Cazorla en dicho equipo). Para mí es todo un misterio. ¿Tendremos que contratar de una vez por todas a Michel para que el Real Madrid ocupe las bandas? Ya me gustaría, ya.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Arruinando el prestigio del Real Madrid


El Real Madrid es el mejor equipo del siglo XX y, por lo que llevamos de XXI, el mejor de la historia. Sin embargo, de seguir así, pronto seremos el mayor hazmerreír de todos los tiempos, si no lo somos ya.
Intentaré mantenerme frío, cosa difícil ya que estoy viendo cómo hunden al Real Madrid y si algo soy en esta vida es madridista; pero entiendo que volverse loco nunca ha sido una solución para nada.

Independientemente de quien salte a un campo, el Real Madrid no puede perder contra un Segunda B. Fijáos en que digo perder, así que recibir un baño de juego y una goleada, es algo que ni siquiera debería contemplarse como posible. Pero ayer el primera división parecía el Alcorcón, que jugó un fútbol de altura, ganándonos demostrando mucha clase en el terreno de juego y sin ningún tipo de artimañas tipo entradas a destiempo, marrullerías ni nada por el estilo. Los futbolistas locales y su afición demostraron ser caballeros, entendidos y, sobre todo, unos auténticos profesionales que saben de qué va esto. Así que, desde aquí, mi respeto y admiración.

Ahora vamos con los nuestros, que hay para todos. Comenzaremos con la cúpula directiva. Lo dijo Del Bosque hace pocos meses: un equipo no se forma a base de talonario. Algunos pensamos que el salmantino rajaba contra Florentino por la animadversión que se tienen, pero tenía razón. Florentino y compañía llegaron, igual que en su primera etapa y trataron de eliminar todo lo que oliese a Ramón Calderón; la otra vez se fueron cargando todo lo relacionado con Lorenzo Sanz, pero como lo hicieron escalonadamente, todavía pudimos ganar un par de ligas y una Champions. El problema es que ahora se hace de golpe y porrazo, de forma que nos encontramos con el galacticidio ahorrándonos tres años (recordemos que el Real Madrid, con FP, sólo ha funcionado tres años, porque este ya es el séptimo como mandatario, de forma que el bagaje empieza a resultar muy pobre).

Se echó a Snejder (un gravísimo error y si bien se terminó marchando por pasta, no tenía ninguna intención de marcharse) echamos a Robben (no es santo de mi devoción como titular, pero saliendo del banquillo puede romper partidos como, por ejemplo, el de Gijón) fuera Torres, todo el verano intentando echar a gente de mala manera... Hagamos un equipo nuevo sin contar con lo anterior... Echemos un vistazo rápido a Sevilla y Barcelona: han hecho fichajes, sí, pero para mejorar lo que había, no para cambiarlo todo. El resultado es que son dos bloques sólidos, cosa que sólo se consigue manteniendo una serie de jugadores durante unos años. La política de FP y compañía es contraria a ello, ya que les gusta empezar desde cero para así llevarse todos los méritos. Si ganamos se los llevarán, así que es lícito darles palos cuando el prestigio del Real Madrid es arrastrado de esta manera.

Ahora vamos con el cuerpo técnico y jugadores. ¿Diarrá y Guti de medios-centro? ¿De verdad alguien se fijó anoche en Diarrá? No le tengo animadversión al de Mali porque sí, sino porque es un cáncer, un caradura, un geta que trata de pasar desapercibido en el Real Madrid. Guti es media-punta, pero tiene clase para jugar de medio-centro. El problema surge cuando se queda solo, sin ningún apoyo (Diarrá huía literalmente de forma descarada cuando el catorce tenía el esférico) y sin desmarques a quienes echar el balón. ¿Resultado? Guti se empieza a encender y en cuanto recibe un par de patadas del rival, se calienta. Tuvo que ser sustituido porque si no, el Real Madrid se hubiera quedado con diez. ¿Guti es el culpable? Tiene parte de culpa, sí, pero no es responsable del esquema de Pellegrini ni la desidia de unos compañeros, comenzando por el cáncer Diarrá, que lo dejaron solo.

Seguimos sin bandas. Van der Vaart en una y Granero en otra. El holandés acabó haciendo la guerra por su cuenta en el medio y Granero, directamente, de vacaciones.

La defensa... ¿Dónde está la defensa? El Alcorcón jugó muy bien, cierto, con las ideas muy claras, apoyando al compañero que llevaba el balón para que siempre tuviera varias líneas de pase (eso que el Real Madrid es incapaz de hacer). Si le sumamos que la defensa del Real Madrid fue un auténtico regalo (no correr, no cubrir al rival y pasar de todo es cosa de los jugadores, no de Pellegrini) tenemos que, a pesar de caer por cuatro goles, Dudek fue, con diferencia, el mejor del partido. Al menos hubo un profesional en el campo que trató de que el prestigio del club no se hundiera. A los tres minutos ya había realizado tres paradones y a lo largo del partido tuvo que emplearse a fondo, demostrando que tiene tanta clase que la inactividad no le afecta. Dudek fue el único superviviente del naufragio generalizado y es justo reconocérselo.

En ataque un desastre. No se puede decir que Raúl y Benzemá estuvieran parados, porque se movieron, corrieron y lo intentaron. De hecho hubo ocasiones de gol, lo que pasa es que el meta rival también juega y lo hizo de cine. También está la falta de puntería en ocasiones de los nuestros y lo mal organizados que estaban los ataques, dado que era complicado sacar tiros limpios porque la defensa rival, a diferencia de la nuestra, estaba absolutamente organizada.

Vamos terminando, que me desespero. El esquema de Pellegrini no funciona y menos con Diarrá. ¿Por qué no poner a Gago junto a Guti? Salió el argentino en la segunda parte y el Real Madrid mejoró, no mucho, pero comenzamos a crear ocasiones de peligro y el centro del campo empezó a defender algo (en la primera mitad, por lo visto, tenían instrucciones precisas para no intentar quitar el balón al rival). Pero, independientemente de la táctica, ayer había ocho internacionales en el campo, futbolistas que llevaban la camiseta del Real Madrid y, por lo visto, les daba igual. Eso es imperdonable.

Veremos cómo sigue esto. No sé si los futbolistas le hicieron la cama al Mister (no lo sé porque, para que aún pasemos más vergüenza, resulta que corrieron) lo que sí sé es que esto no se puede consentir. No hay identidad, ni estilo de juego ni nada de nada. Jugando como ayer, cualquiera nos golea, hasta un Segunda B.

Y creíamos que lo del Milán fue un palo. Veremos que pasa el sábado contra el Getafe, pero, de momento, no veo la luz al final del túnel. Espero equivocarme.

domingo, 25 de octubre de 2009

¿Sangre u horchata?


Desde el descalabro en Milán, llevo unos días pensando en una acción que, cuando era niño, me marcó como madridista. El Real Madrid se enfrentaba al Barcelona en competición liguera; Maradona profundizaba con el balón controlado por banda derecha; Camacho sale a su encuentro y el astro argentino lo dribla utilizando el recurso del túnel, de forma que cuando superó al lateral blanco lo hizo con mofa y guasa (una de esas sonrisitas suyas insoportables). En la siguiente ocasión en la que Maradona encaró a Camacho, éste le propinó una tijera de tal magnitud que deja a la altura de una caricia las que solía hacer Roberto Carlos. El argentino en el suelo aullando de dolor, casi llorando; el árbitro con la amarilla amonestando al defensa madridista; pero Camacho quieto, con mirada de odio, esperando a que Maradona se levantase. No sé qué le dijo, pero a Maradona se le terminaron las ganas de faltar al respeto a nadie del Real Madrid aquella tarde.

No hace falta que os recuerde la rivalidad con el Milán, pero sí me gustaría hacer hincapié en un bochornoso hecho acaecido la temporada pasada. Partido de liga en el Bernabéu contra el Sporting: homenaje de lujo a Quini y un trato fantástico y de apoyo a unos futbolistas que no sabían lo que era ganar en primera con su equipo. La vuelta en el Molinón, a pesar de que Quini se fue llorando de emoción por las atenciones de don Raúl González Blanco hacia su persona, fue de insultos continuados contra el capitán blanco desde el calentamiento, cánticos pro-Villa e insultos varios (recurriendo al tristemente famoso "así así gana el Madrid", que inventaron ellos en los setenta, siendo abanderados del mal gusto).

Con estos antecedentes, lo lógico es que el Real Madrid hubiera salido a machacar al Sporting desde el minuto uno, pero no: por lo visto el partido no empezaba hasta las nueve, así que los primeros cuarenta y cinco minutos, hemos visto un deambular de futbolistas sin orden ni concierto, que parecían tener horchata en vez de sangre, exceptuando una vez más a Raúl, uno de los poquísimos deportistas de élite de todos los tiempos que ha estado quince años al máximo nivel rindiendo siempre a tope.

Se habla mucho de Pellegrini, de su sistema, del cuadrado, de Lass y Xabi (hay que ser patán para decir que Xabi no puede jugar con Lass, cuando lleva años haciéndolo con Macherano, que realiza funicones similares al madridista, pero la prensa es así). ¿Por qué no se habla de que muchos futbolistas del Real Madrid parecen haber perdido todo lo que implica llevar nuestra camiseta?

Hablaba esta semana el gran Amancio Amaro sobre tiempos mejores. A la pregunta de cómo consiguieron aquellas Copas de Europa, respondió con semblante triste: "muy fácil, corríamos todo el partido y siempre apoyábamos al compañero que tenía el balón". Tan fácil como eso, pero claro, para ello hay que sudar y parece haber gente demasiado acomodada en este equipo (aunque algunos sectores lo simplifiquen diciendo que todo es culpa del único que siempre corre y que entiende realmente los valores madridistas, el siete de España).

No es que esté contento con Pellegrini, que no lo estoy, pero independientemente de quién fuera el entrenador y de cual fuera la táctica, si se juega al fútbol caminando y sin pasión, no se puede ganar. Vi el martes en Champions al Stutgar perder contra el Sevilla, pero ¡Madre mía qué forma de jugar al fútbol! Los alemanes jugaban al primer toque, buscando espacios, apoyos, corriendo con y sin balón... Ellos dominaban el partido, pero el Sevilla logró un tanto a la contra y cambió el curso del mismo (lo que da todavía más valor al triunfo hispalense). Esta tarde he visto un partido que, normalmente, calificaría con el término "sin pena ni gloria": Tottenham 0 - Stoke 1. Han perdido los locales, por lo que algo habrán hecho mal, eso está claro, pero han hecho una primera parte de fútbol vertical, tocando de primera pero en corto, nada de balonazos largos ni similares, en el que daba gusto ver cómo se movían los futbolistas sin balón. Han fallado las ocasiones de gol, pero si un equipo de mitad de tabla inglesa es capaz de jugar así, ¿no va a ser capaz de hacerlo todo un Real Madrid? Lo que cuesta es el gol y pegada la tenemos toda; ahora bien, si no corremos, no hay nada que hacer.

Se nota que no me apetece hablar mucho del partido, ¿verdad? Lo cierto es que tras la lamentable y olvidable primera parte, parece que hemos despertado en la segunda mitad, aunque no tengo demasiado claro si ha sido por mérito nuestro o por el precario estado físico del rival, que se iba viniendo abajo por momentos. Llegados aquí quiero hacer mención especial a Guti, que ha hecho gran parte del trabajo que se le debería exigir a Kaká, en concepto de desatascar el juego ofensivo con precisos pases.

Poco a poco nos hemos ido imponiendo, de forma que los últimos veinte minutos la portería local ha sufrido el acoso blanco y casi derribo... ¡Qué digo! Hemos derribado el muro rival, pero el árbitro se ha encargado de anular, de forma ¡ESCANDALOSA! un gran gol de Raúl (otra vez el que nunca hace nada en la brecha): Kaká recupera un balón con el pecho y Raúl culmina la jugada con un soberbio trallazo con la diestra. En primera instancia, el árbitro no ha pitado nada, dado que ha sido un gol legal. Pero los sportinguistas ladrones han levantado sus huesudos brazos (algunos parecía que iban a desmayarse) y el linier tonto y cobarde de turno ha alzado el banderín. Aunque para cobarde el colegiado, que no ha querido imponer sus galones y ha dejado el peso de la decisión al tonto del banderín.

El Real Madrid no puede saltar a un campo de fútbol como lo ha hecho hoy ni como lo hizo el miércoles frente al Milán, es cierto, pero nos han robado, lisa y llanamente. ¿Debíamos haber hecho más? Por supuesto, pero gana el que más goles marca, no el que hace todo lo que puede. El Sporting sólo ha llegado una vez de forma clara a las inmediaciones de Casillas (acción solventada con una gran parada de Iker por bajo) y ya; el Real Madrid ha generado unas cuantas ocasiones de gol y ha logrado culminar una. Si no ha subido al marcador ha sido por el árbitro y si sumamos los regalitos al Barcelona contra Almería y Málaga, además del pequeño atraco de hoy, ya son muchos puntos de diferencia en una liga que promete ser muy apretada.

Aún así, dormimos como líderes... ¡Increíble!

Desanimado por el juego del equipo y por los infernales arbitrajes, se despide este humilde vikingo pamplonés hasta el próximo partido. Espero que los ánimos hayan mejorado, porque esta semana tan pobre futbolísticamente hablando, me ha dañado mucho la moral; la tengo por los suelos. Veremos qué pasa en la Copa.

jueves, 22 de octubre de 2009

El cartero siempre llama dos veces

Lo que viene a continuación no lo he escrito yo, sino el amigo Pedro Sangines Lammers, pero lo confirmo y apruebo casi al 100%, excepto en lo de Higuaín, pero es que al igual que me pasó a mi, Pedro desconocía su ¿lesión?


Como viene siendo habitual después de los partidos del Real Madrid envío mis comentarios a los amigos y hoy lo haré con especial dedicación.


Reconozco que ayer tuve que cambiar el título después del descanso y de lo que iba a ser al final de la primera parte "La caída de los dioses" a lo que fue al final del partido, "El cartero siempre llama dos veces".


La primera parte, vimos un Milán penoso que era un fantasma de aquel equipo de Sachi y Van Basten que tantos disgustos dio a la quinta del Buitre y a los seguidores madridistas, un Ronaldinho cargado de mantecas que con una camiseta XXL intentaba disimular los excesos provocados por la "dolce vita", un Seedorf que parecía el simpático Tío Tom, un Zambrotta que parecía el malo de las películas de terror y un Dida que parecía estar jugando un partido de viejas glorias.Ante este panorama, un Madrid sin esquema de juego iba sacando el partido adelante con más pena que gloria y en algunos momentos parecía que le daría una "manita " al Milán.


La segunda parte, demostró que el Real Madrid tenía el aspecto de la primera época de Florentino en el Madrid, los mismos fallos y los mismos errores que acabaron con VALDANO & Cía.. Un equipo multimillonario pensado para el marketing y no para el fútbol, y como no podía ser de otra forma "garrotazo" al muñeco de trapo.Sin esquema de juego sin ideas sin aparecer sus figuras y con el banquillo sin entrenador, Pellegrini petrificado como si hubiera visto al mismísimo Conde Drácula.


Con las excepciones de Raúl y Lass, para el resto "Pulgar hacia abajo" en el Anfiteatro de los sueños y para colmo de males hasta el mejor portero del mundo ¡falló! El millonario Kaka daba la impresión de tener miedo a sus antiguos amiguetes del Milán, Benzema promesa que sigue sin cuajar un partido excepcional en casa, ¿de verdad que Benzema es mejor que Negrado o Robben ? Ramos dio con un fallo en la banda el segundo gol al Milán, ¿cómo es posible que con una pelota pegada a la banda y defendida por dos madridistas se la lleve un abuelete del Milán?, pues muy sencillo exceso de vista ¡déjala que sale fuera! En ese momento los italianos nos hicieron la corbata y nos devolvieron la picaresca rauliana. Xabi Alonso desde la lesión no ha vuelto por sus fueros y Marcelo cada vez es más interior que defensa, aunque a decir verdad, con este bodrio que han inventado Valdano y Pellegrini de jugar sin extremos los pobres laterales hacen una maratón en cada partido. Finalmente los centrales del Madrid siguen sin acoplarse, una más y van mil.


Pasando al director de orquesta Pellegrini, ¿como es posible que desde el minuto 60 no viera lo que vimos todos y no metió a Van der Vart e Higuaín en lugar de Kaká y Benzema?, ¿cómo es posible que Diarra no entrara por un agotadísimo Granero que salvo los primeros 20 minutos iba como un Zombi por el medio campo? Pues bien esta noche de miedo nos ha traído la resurrección del Milán Inserso FC y lo que es peor de la final en el Bernabeu a la pregunta que nos hacemos desde hace 7 años ¿pasaremos a Octavos? Carajo, Florentino ¿Cómo vas a cobrar 6 millones de euros por partido amistoso si llevas 7 años quedándote a las puertas del Olimpo? El próximo partido, fuera, contra un Milán crecidísimo y en una olla a presión: "San Siro", el siguiente contra un Zurich sin figuras pero que corre que se las pela y si no que le pregunten al Milán y de postre el "Infierno de Marsella" con los "Santos Boys metiendo gresca".


En definitiva, que tuve que cambiar el título, de la Caída de los dioses al Cartero siempre llama dos veces...


miércoles, 21 de octubre de 2009

La cruda realidad


¡Qué mala es la euforia! Es una consejera tan dudosa como la ira, por eso intentaré centrarme para tratar de analizar todo esto sin emociones, a ver qué podemos sacar en limpio.

Hablaba de la euforia. Que un aficionado esté convencido de que su equipo va a ganar no es malo. De hecho, si eres hincha del Real Madrid, lo normal es pensar siempre que tu equipo va a ganar. (yo mismo estaba convencido de ello hace unas horas) El problema no es una hinchada confiada, sino una plantilla confiada, un cuerpo técnico demasiado crecido, una directiva que no vive en el mundo real y una prensa que no ayuda. Es lógico que hoy los aficionados estuviéramos eufóricos... Lo que ya carece de lógica es que los futbolistas tuvieran el partido ganado antes de salir a jugarlo.

Parece que revivimos el famoso "chorreo" de Boluda. Me refiero a que contrasta la diferencia entre lo dicho por Valdano y Pellegrini, por ejemplo, con los comentarios de Leonardo y Seedorf: "jugamos contra uno de los mejores equipos del mundo" dijo el primero, "no somos favoritos para ganar la Champions" comentó el segundo. Y al final, 2-3.

Pero la derrota de hoy no sólo obedece a un exceso de confianza y optimismo; como dirían los Looney Tunes, "aún hay más". Todo madridista sabe que el día que se juega la Copa de Europa, es especial. Nosotros hicimos grande este trofeo y, recíprocamente, el torneo nos hizo grandes: el mejor equipo del siglo XX. ¿Por qué? Porque ganar esta competición es lo más difícil que hay en cuanto a clubes se refiere, de ahí el espíritu de Juanito, el miedo que causaba Camacho incluso antes de saltar al campo (en el mismo túnel de vestuarios) el pavor que provocaba la Quinta del Buitre en el Bernabéu cuando atacaba con todo. Esas remontadas, esas victorias, ese terror que generaba el Real Madrid en Europa llegaba gracias a la motivación de todos los futbolistas. Hoy, en muchas fases, el partido parecía un amistoso.

Toca hablar de Pellegrini. No me escondo: creí que era el entrenador idóneo para el Real Madrid. Este verano era mi primera opción (Valdano ya se ha encargado esta semana de recordarnos que no era la suya, ¿le estará haciendo la cama?) Ahora bien, no lo reconozco. ¿Dónde está el técnico que hizo jugar tan bien al Villarreal? ¿Dónde está ese genio que sabía exactamente cuándo hacer las rotaciones para tener siempre un equipo competitivo? ¿Qué ha sido del tipo que logró llevar a un club muy modesto a semifinales de la Champions? No sé si le viene grande el cargo o si los de arriba no le dejan trabajar, pero no entiendo por qué no se ha seguido la línea de trabajo trazada en la primera parte del encuentro en Zurich. Es más: todavía no sé cual es la táctica del mister, ni esquema, ni desarrollo, ni nada de nada.

Lo dije en la crónica del Valladolid y lo repito hoy: jugamos con dos defensas. Albiol y Pepe me recuerdan a Felipe Reyes en baloncesto, ya que son los únicos que defienden. Marcelo y Ramos son extremos. Alguna que otra vez bajan, pero pasan la mayor parte del partido en campo contrario...¡¡¡HASTA LOS INFANTILES SABEN QUE JAMÁS DEBEN SUBIR A LA VEZ LOS DOS LATERALES!!! Por lo visto al Real Madrid no ha llegado tal información. En fin, retomemos la calma que será mejor.

Este equipo cada vez me recuerda más a lo visto el año pasado, en el sentido de que no es un bloque, ya que está partido en mil trocitos. Los centrales defienden como pueden, sin apenas recibir apoyos: a la desaparición de los laterales hay que añadir que Lass lleva dos partidos un tanto perdido. Si encima sumamos los graves errores de Casillas (prefiero no saber dónde tenía la cabeza en los dos primeros goles) el desastre es casi seguro.

Después tenemos el centro del campo. No puedo entender que jugando con Lass, Alonso, Kaká y Granero la medular esté tan solitaria. Ha habido momentos en los que no había jugadores madridistas ni milanistas... Para mí es un absoluto Expediente X. Sigo acordándome del año pasado: la prensa cebándose en que la culpa era de Gago, cuando no había nadie a quien pasarle el balón. Eso le ha sucedido hoy a Xabi Alonso en múltiples ocasiones: levantaba la cabeza y como el único que se desmarcaba arriba era Raúl, la defensa italiana tenía muy fácil imposibilitar el juego en estático de los blancos.

Uno podría pensar que si Marcelo y Ramos no defienden, el equipo contará, al menos, con bandas en ataque. Pues va a ser que no, porque hasta que no ha entrado Drenthe en la segunda mitad, no hemos visto profundidad en ese sentido. Marcelo lo ha intentado tímidamente, pero es que Ramos no ha dado un pase a derechas (un error suyo ha sido el 50% del segundo gol visitante).

Y ya en ataque, Kaká desaparecido en la primera mitad y un chupón de tomo y lomo en la segunda, desperdiciando ocasiones en lugar de generarlas; Benzemá de más a menos, moviéndose bien en el primer período para terminar diluyéndose en el naufragio general y Raúl corazón de león intentándolo todo, nuevamente marcando, aunque al final de nada haya servido.

Como llevamos desde el sábado aguantando los insultos de los envidiosos al gran capitán, en cuanto el siete ha marcado el primero, ha llegado la locura. Todos hemos entonado el "pero si está muerto" de Manolo Lama y nos hemos olvidado del Milán. Hasta se ha desvanecido en nuestra memoria el penalti que le han hecho a Benzema un par de minutos antes (si no nos pitan eso, creo que en Champions nos podemos olvidar de los once metros). Sin embargo sólo llevábamos un cuarto de hora de partido y enfrente estaba el Milán. Olvidarlo es como correr los Sanfermines sin mirar de vez en cuando para atrás, a ver dónde están los astados.

Si te adelantas en el marcador en una competición tan complicada como la Champions, debes saber jugar con eso. El rival es lento, no quiere arriesgar ya que tiene miedo a nuestra pegada, están agazapados y han venido con la intención de jugar a la contra... ¿Por qué facilitarles la labor? Si van perdiendo, no les sirve de nada quedarse atrás: deberán arriesgar. Pero claro, si nosotros seguimos defendiendo con dos y jugando con medio equipo durante gran parte del partido (me refiero a las desapariciones de Kaká, Ramos, Granero y a ratos Benzema y Marcelo) seguimos posibilitando al rival emplear el único estilo de juego con el que puede contar hoy en día.

Así, al final, el Milán nos ha ganado prácticamente andando. Es una realidad muy dura, pero es lo que hay. Tenemos futbolistas muy buenos, pero les falta actitud. Tenemos un entrenador que demostró su sapiencia futbolística en Villarreal, que parece haberse vuelto amnésico de golpe y porrazo. Y tenemos una cúpula directiva que no deja trabajar a los profesionales (esto ya lo sabíamos de la etapa anterior, pero meterse con Florentino es de herejes, claro).

Al final, estamos como en los últimos años: a merced de las genialidades de Casillas y Raúl. Si encima falla Iker... No sé cómo evolucionará esto, pero han conseguido de golpe y porrazo quitarnos toda esperanza de hacer un buen año. Ahora, a verlas venir.

lunes, 19 de octubre de 2009

Ayza Gámez pasó desapercibido


Es difícil, muchas veces, juzgar la labor arbitral de un partido. Si éste está comandado por un mal colegiado, mucho más. El sábado Ayza Gámez salió indemne del Bernabéu gracias al resultado final, claramente favorable a los locales.

A los cuatro minutos se comió un penalti sobre Granero. Mal comienzo, gracias al comportamiento de ambos contendientes, que le facilitaron su labor, pudo sacar el partido sin tener apenas errores graves en sus decisiones y que al final no se hablara del árbitro, lo mejor que se puede decir.

Junto con el mencionado penalti sobre Granero, en los minutos 29 y 34 cometió, bien es cierto que los culpables fueron sus asistentes, sus otros dos errores graves. En el primero no señalaron el fuera de juego de Diego Costa. La rápida reacción de Sergio Ramos evito un desenlace grave para los intereses locales.


En el segundo sí señalaron fuera de juego de Benzema, cuando su posición era legal y se quedaba franco, con el balón controlado, ante Jacobo. El que sí estaba, en fuera de juego, era Raúl ,que astutamente dejó pasar la pelota, para la entrada del francés, que ganó por velocidad la espalda a la defensa rival.

Quiero comentar unos errores que se cometen, cada vez más, en todos los arbitrajes, y en el Bernabéu se dio en varias ocasiones: los saques de esquina se efectúan FUERA del círculo habilitado a tal efecto. En una ocasión Ayza corrigió al pucelano de turno, pero éste no le hizo caso. Ya no les llega con los saques de banda –un 90% son efectuados de forma anti-reglamentaria-, con la distancia de las barreras, sino que ahora en los saques de esquina también se están implantando las irregularidades.

Aprovecho para hacer el comentario sobre el árbitro designado para dirigirnos ante el Milán, el belga Frank de Bleeckere. Baste recordar su labor en el encuentro de 1/8 de final, de la temporada pasada, en el Liverpool – Real Madrid. El primer gol del Liverpool viene precedido de una falta de Torres sobre Pepe. No satisfecho con el regalito, pasó al regalazo: penalti inexistente de Heinze.


En total nos arbitró otros tres partidos: una victoria sobre el Bayern de Munich por 3-2, un empate 1-1 ante el Olympique de Lyon en el Bernabéu y un empate 2-2 contra la Lazio en Italia.

Mejor palmarés tienen los italianos con él. Dos victorias en San Siro, 4-0 ante el Shakhar Donetsk y 3-0 al Manchester United, y un empate 1-1 contra el Bayern de Múnich, en Alemania.

Nilo Campo
Socio nº 89506 del R. Madrid
Presidente de la Peña Madrdista de Xove (Lugo)

domingo, 18 de octubre de 2009

¡Qué mala es la envidia!


Sobre la nueva victoria del Real Madrid el sábado ante el Valladolid hay mucho que analizar. Pero, antes de nada, don Raúl González Blanco merece capítulo aparte.

Es increíble la avalancha anti-raulista que se produce en foros, diarios, radios y cualquier sitio imaginable cada vez que el siete de España hace algo grande, es decir, cada domingo. Ayer marcó dos goles y rápidamente algún "astuto" se ha apresurado a decir que sólo se limitó a empujar el balón. Me viene a la cabeza las grandes tardes de Butragueño, como los cuatro goles que marcó en el mundial de México 86 a Dinamarca. Hablamos de una selección que en aquella edición partía como una de las favoritas y el Buitre le metió cuatro en una tarde así, como quien no quiere la cosa. Y claro, los comentarios anti-Butragueño no se hicieron esperar: "vaya goles, así también los meto yo, se los han regalado...". Porque claro, estar libre de marca en posición correcta dentro del área rival es algo muy fácil. La pregunta viene rápida a mi mente: ¿por qué personas que jamás han tenido criterio como para saber qué hacer con un balón en los pies hablan tanto de fútbol? La respuesta es sencilla: no hablan de fútbol, hablan de pelota.

Granero entra por una banda. Si no hubiera nadie desmarcado, ¿valdría para algo su acción? Marcelo entra por la otra. Si Raúl no llegase por sorpresa desde atrás, ¿de qué habría servido? Pero algún tonto de remate ha puesto por ahí que no son goles de Raúl, que son de Granero y Marcelo. Entonces me da la risa tonta y digo, ¡Qué pena!, ¡Cuánta envidia hay en este país! Son quince años jugando en el Real Madrid a máximo nivel. Ningún entrenador madridista lo ha discutido nunca y Luis Aragonés prescindió de él por motivos extradeportivos (no aguantó que Raúl, Salgado y Cañizares le exigieran que no filtrase nada a la prensa y echó a los tres). ¿Qué pasa? ¿Es que a los entrenadores les gusta tirar piedras contra su tejado? ¿O será que todos los tontos que se cuelan en internet para despotricar contra el gran capitán saben más de fútbol que Pellegrini, Capello, Schuster, Del Bosque, Hiddink, Camacho, Toshack, Juande Ramos, Heynckess... Sí, seguro que es eso. Pero los hechos ahí están: Raúl sigue marcando goles y no les cierra la boca única y exclusivamente porque son demasiado tontos como para saber articular las mandíbulas para que no les entren moscas.

Dicho esto, la jornada de ayer fue muy propicia para el Real Madrid. El Barcelona empató, el Sevilla perdió y ya estamos a un puntito del liderato. Es curioso que cuando ganamos nosotros la prensa no para de decir que el equipo siembra muchas dudas, sobre todo porque nadie las tiene acerca de quienes ayer no consiguieron ganar, Sevilla y Barcelona, que son dos equipazos, sin fisuras, que saben a lo que juegan y bla bla bla. Pero, ¿quién ganó ayer? El Real Madrid. Un equipo sin Cristiano y sin Kaká, pero con Raúl y al que le duela, que se tome una aspirina porque el siete tiene cuerda para rato.

El otro día hablé de mi idea de un Real Madrid con una línea defensiva formada por tres hombres. Hubo quien me dijo que a lo mejor era arriesgado en según que partidos, pero es que ayer el Real Madrid jugó con dos defensas, ya que Marcelo y Ramos fueron prácticamente extremos. ¿No hay nadie que pueda explicar a estos chicos que un lateral jamás debe sumarse al ataque si el otro lateral ya está en campo contrario? Así llegaron los dos tantos del Valladolid: error defensivo de Ramos por estar mal colocado, falta de Lass en la ayuda y de lanzamiento magistral cayó el primero; fallo de Alonso en el pase y como no hay una cobertura tras él porque la defensa está por ahí desperdigada, segundo gol a la contra. Dando facilidades así, ganaremos los partidos como siempre: goles de Raúl y paradones de San Casillas.

Otro punto negro son las jugadas a balón parado. En la mayoría de los corners los atacantes vallisoletanos ganaron el balón de cabeza. Unas veces la falta de puntería, otras que el remate no fue claro y otras Casillas evitaron los goles, pero resulta bastante grave que sigamos sin corregir este fallo. De hecho, creo que el único saque de esquina que no ganaron los visitantes fue uno que despejó Raúl (defiende, ataca, ayuda al compañero y ni siquiera falla en los corners, ¡qué crack!).

En cuanto al juego ofensivo, se volvió a demostrar la máxima que dice que en el fútbol hay que ocupar todos los espacios. Los dos primeros goles fueron acciones por banda y el tercero, partió también desde allí, ya que Marcelo trazó una diagonal hacia adentro para batir de un gran chut al meta rival desde fuera del área. Por cierto, franca mejoría de Marcelo con respecto al partido de Sevilla, sobre todo en defensa. Cometió algunos fallos atrás (uno clamoroso por cierto en el que él y Van der Vaart prácticamente dejaron pasar entre ambos a un extremo rival) pero en líneas generales respondió. No así Ramos que si bien salvó al equipo in extremis de encajar un gol en la primera mitad en una gran acción, llegando por detrás de un delantero vallisoletano para rebañarle el balón con mucha clase, estuvo muy perdido tácticamente hablando la mayoría del partido. Si luego en ataque hubiera cumplido, una cosa compensaría la otra, pero no fue su tarde más feliz en lo que a precisión en el pase se refiere.

Otro que también ha mejorado es Xabi Alonso. Le costó coger ritmo de partido, yendo de menos a más, pero terminó demostrando su clase jugando con mucho criterio en la segunda mitad, actuación culminada con un genial pase largo a Higuaín, que marcó de sublime vaselina, todo un golazo (¿le dirá Maradona a este también "que la chupe" o lo llevará al mundial?). Lo de Alonso fue justo lo contrario que le ocurrió a Granero: tras unos primeros veinte minutos jugando como un crack, se fue desinflando poco a poco para terminar casi inadvertido. Es un futbolista que me encanta, pero se empieza a parecer peligrosamente a Guti (tanto en lo bueno como en lo malo). Es pronto para tal juicio así que veremos cómo evoluciona.

Del resto, Pepe completó una buena actuación, Albiol también supo dar la cara en un partido difícil (defender con dos es harto complicado) y Lass, ¿qué decir del genio francés? Tácticamente perfecto, trabajador incansable... Si Granero tiene cualidades de Guti, parece que Lass tiene las de Raúl. Eso es bueno.

No sé si me dejo a alguien. ¡Ah sí! Benzemá. Falló en el control, en el regate y en el remate, corrió muy poco, no buscó bien los desmarques... Pero claro, la culpa de que el francés no juegue bien la tiene Raúl, claro, que ni juega ni deja jugar. ¿Y qué más? Defendí el fichaje de Benzemá en verano, no me escondo por ello. Sigo pensando que ha sido una buena contratación por aquello de que es muy joven y atesora gran calidad. Pero más vale que empiece a espabilarse cuanto antes, porque se le fichó por una cantidad de dinero equivalente a un crack, lo que le obliga a demostrar un montón de cosas. Espero que lo haga, pero me da miedo verlo tan perdido.

Y nada más. Creo que me he quedado corto hablando sobre Raúl, ya que jugó mejor de como lo he puesto (y los envidiosos, que escuchen a Maradona y obren en consecuencia). El miércoles toca el Milán y hay muchas ganas de revancha. No estará Cristiano, pero estará Raúl. ¡Que tiemblen los tifosi!

viernes, 16 de octubre de 2009

¿Deberíamos jugar con una defensa de 3?


Llevo días meditando sobre el juego del equipo y he llegado a la siguiente conclusión: Pellegrini debería probar con una defensa de tres. Intentaré razonar mi idea.

El partido en el que más cosas en limpio he sacado sobre el Real Madrid actual fue el disputado en Suiza; mejor dicho, en los primeros 45 minutos de ese partido. Jugando como visitantes contra un rival fuerte (el Milán no pudo con ellos en San Siro) conseguimos ganar con un fútbol de altura. La clave fue el adelantamiento de la línea defensiva casi hasta la medular, de forma que, con las líneas juntas y adelantadas, los suizos apenas crearon ocasiones de ataque. Por contra, el Real Madrid dispuso de innumerables oportunidades para sentenciar el choque. El único problema que vi fue que el equipo atacaba con demasiada gente: dos laterales, dos extremos, dos delanteros y un media-punta además de todo el equipo rival (al que metimos en su campo por el mencionado adelantamiento de la defensa) no cabían, de forma que generar espacios y sorpresa resultó trabajoso y complicado, solventado por la gran calidad de los nuestros.

Teniendo en cuenta lo dicho, me fijo en la parte que, ahora mismo, tenemos más floja: los laterales. Hace años que vengo defendiendo la idea de que Sergio Ramos es un gran central, pero como lateral se queda en un simple "aceptable". De la misma manera, propugno que Marcelo es un interior izquierda bastante bueno, pero un lateral del que no te puedes fiar (demasiadas pifias en defensa, no sólo por el último partido, sino por su trayectoria general en el Real Madrid).

Así pues, entre unas cosas y otras, pienso: ¿por qué no jugar sólo con tres centrales? Pepe, Ramos y Albiol son futbolistas rápidos y con suficiente movilidad como para adelantar líneas. El equipo podría jugar con dos delanteros, dos hombres de banda (en lugar de cuatro) dos centrocampistas y un media-punta. El ataque no estaría tan saturado, habría futbolistas como Kaká y C.Ronaldo con total libertad para moverse bien entre líneas bien intercambiando posiciones con la banda y dispondríamos de dos delanteros para culminar las acciones de los compañeros o también para dejarse caer a banda, creando así la sorpresa que suelen llevar a cabo los laterales.

Un once tipo sería el siguiente:

Raúl Benzemá

Kaká


Marcelo Xabi Alonso Lass Cristiano


Albiol Pepe Ramos


Casillas

No sé qué pensaréis vosotros, pero si no tenemos laterales fiables, entiendo que es de lógica ocultar este fallo (aunque algunos me tachéis de mentalidad italiana, no es malo saber ocultar los fallos). Lass puede defender en el lateral derecho o incrustarse como segundo central en las jugadas de ataque estático de los rivales. Otra opción es que Marcelo baje únicamente en este tipo de jugadas (aunque es un riesgo) quedando Albiol y Pepe de centrales y Ramos de lateral provisional.

¿Miedo a las contras de los rivales? Si este sistema se aplica bien, no debemos tenerlo. Pepe y Ramos son rapidísimos y Albiol no es precisamente un cojo. Además está Lass, posiblemente el mejor futbolista del mundo a la hora de cortar contraataques rivales. Tal y como yo lo veo, tenemos un equipo con muchos mimbres como para jugar así, con las líneas adelantadas y un defensa menos de lo habitual.

En ataque lo ya comentado: dos delanteros que pueden ser referencia o dejarse caer a bandas, un media-punta con total libertad de movimientos, al estar bien resguardado por Lass y por los defensas adelantados, un extremo (Cristiano) con libertad para atacar por banda o intercambiar posiciones con el resto y otro (Marcelo) para jugar como interior, dando apoyo al centro del campo pero sin renunciar a entrar por banda o a trazar la diagonal hacia adentro.

Con lo que tenemos, creo que es el sistema ideal. Espero vuestras opiniones.

PD: El que no quiere a Raúl, no quiere al Real Madrid. Si alguien tiene algún problema con la foto, que llame a mi representante, el señor Jack Bauer y resuelva con él el problema.

jueves, 15 de octubre de 2009

Real Madrid - Valladolid: Ayza Gámez


Miguel Ángel Ayza Gámez, colegiado valenciano, nacido el día 13 de diciembre de 1989, es el árbitro designado para dirigir el encuentro Real Madrid – Valladolid.

Pertenece al colegio valenciano de árbitros y su debut en primera división fue el 28 de agosto del 2005, en el encuentro de la 1ª jornada Español 0 – Getafe 2, siendo esta su 5ª en primera división y con un total de 68 partidos de los cuales en 28 ocasiones ganaron los locales, en 12 terminó en tablas y en 28 los visitantes. Lleva 350 tarjetas amarillas mostradas y 23 rojas.



En la temporada anterior quedó en el puesto 21º para el trofeo Guruzeta con una puntuación de 0,83. En la calificación de la RFEF su puesto fue 19º, con la calificación de 9,45. Como se comprueba no es de los mejores y esta lejos de lograr la escarapela FIFA.

Recordar que el jueves 23 de marzo del 2006, dirigiendo el encuentro Atlético Madrid – Sevilla, montó una buena en el minuto 76. Si en la 1ª parte señalo dos penaltis en contra de los rojiblancos, penaltis que detuvo Leo Franco (el 1º a Kanute y el 2º a Saviola), en la segunda parte expulsó a Peter Luccin en el minuto 72. Los ánimos en el Calderón estaban muy caldeados cuando llegó el minuto 76, Antonio Puerta (qepd) marcaba un gol que, en primera instancia Ayza Gámez anula por fuera de juego y luego concede.

Sobre el césped cayeron una lluvia de objetos –entre ellos una botella de licor recogida por al árbitro- y cayendo varios sobre el guardameta Palop, que se queja al colegiado. El valenciano mandó retirar a los vestuarios a los 22 jugadores dando por terminado el encuentro. Tras un cuarto de hora de confusión y nerviosismo, cuando el estadio se había quedado vacío, decidió continuar el mismo dando la “casualidad” que José Mª del Nido, presidente del Sevilla, presenció el mismo desde el banquillo.

Al Real Madrid le arbitro en dos ocasiones, las dos en el Bernabéu. El primero lo gano uno a cero al Zaragoza y el 2º, la temporada anterior, lo perdió 1-3 ante el Mallorca. Mostró 7 cartulinas amarillas a los jugadores blancos pero ninguna a los visitantes.



Al Valladolid le arbitró en 8 ocasiones de las cuales, cuatro como visitante, con un balance de dos victorias y dos derrotas. También le señalo dos penaltis, los dos a favor, uno en Zorrilla y el otro como visitante.

Nilo Campo Santos
Socio nº 89506 del R. Madrid
Presidente Peña Madridista de Xove (Lugo)

Real Madrid -71- Lagun Aro GBC -67-

Crónica del partido y estadísticas.

lunes, 12 de octubre de 2009

La 47: Se equivocaron con Negredo y Torres

Carta número 47 publicada en el diario AS:

Edgar Ayala Ruiz | 12/10/2009


En los últimos partidos del Real Madrid, estamos viendo que no funcionan ni Benzema ni los laterales zurdos. El primero no entra demasiado en juego y Marcelo y Drenthe no terminan de defender como deberían. El caso es que el Real Madrid contaba con Álvaro Negredo, posiblemente el mejor delantero centro español del momento, y Miguel Torres, uno de los defensas más polivalentes con los que se puede contar. Sin embargo, uno se fue al Sevilla con derecho a recompra, donde se ha ganado un puesto en La Roja por la alta calidad demostrada y el otro fue vendido al Getafe, para jugar a las órdenes de Míchel.


Entiendo que de Benzema se puede esperar lo mejor dada su juventud, pero Negredo ya es un futbolista hecho. Además, la llegada del francés puso en peligro, por cuestiones económicas, el fichaje de Xabi Alonso, absolutamente necesario para dirigir a todas las estrellas. Negredo ya estaba en el equipo, por lo que no era necesario desembolso alguno.


El Real Madrid está teniendo problemas en defensa y Benzema no termina de arrancar. Por todo esto, me parece que los mandatarios blancos erraron al desprenderse de Negredo y Torres.

CajaSol -56- Real Madrid -76-

Crónica del partido y estadísticas.

lunes, 5 de octubre de 2009

Una nueva faena de Iturralde

No voy a refugiarme en árbitro para buscar la justificación a la derrota. Nada más lejos de la realidad. Pero tampoco fue un arbitraje como dice hoy la prensa, todo lo contrario, fue un arbitraje buscando su minuto de gloria, que logró en el 34 en la amonestación a Zokora, Perotti y Guti. Buscando lo que más le gusta: ser el protagonista y, al final, como siempre efectuó un arbitraje sibilino.

Bajo mi punto de vista el momento clave de su labor fue en el minuto 6. Sergio Ramos supera a Adriano y encara área rival con clara ventaja. El brasileño le suelta una coz por detrás sin intención de jugar el balón sino de evitar la contra. Iturralde señala la falta pero se “olvida” de amonestarle. Claramente les manda un mensaje a los jugadores locales “os permito extralimitaros, podéis arrear estopa cuanta queráis” y a fe que lo hicieron.


Por si había alguna duda, en el minuto 18, lo deja mejor explicado “el que puede pegar es el equipo local. Los visitantes atenerse al reglamento” tarjeta amarilla para Sergio Ramos ¿Qué diferencia hay entre lo de Adriano y lo de SR? Una muy importante: Adriano derriba al contrario por una falta por detrás, dándole una clara patada, Sergio Ramos corta con el cuerpo la contra de Perotti.

Se confirmaban mis temores, Iturralde, una vez más, nos iba a masacrar, mejor a permitir que nos masacraran y nosotros ni estornudar. Por si quedaba un atisbo de duda, en el minuto 20 amonesta a Luis Fabiano por la coz (patada es otra cosa) a Casillas en los…………….. cataplines, estando el balón en el suelo por la espalda del guardameta. Si eso no es una agresión que alguien me lo explique. Lo más gracioso viene en la redacción del acta (como pondré luego copia de la misma) amonestado por derribar a un contrario. Y tanto que lo derribo, casi lo deja impotente.

No conforme como llevaba el encuentro, los contendientes no se lo ponían “fácil” para lucirse, en el minuto 34 se le presenta la ocasión de tener su minuto de gloria. Ya sé que muchos quizás seáis de la opinión de que hizo bien, que protegió el espectáculo. No estoy de acuerdo, y me explico según acontecieron los hechos. Dragutinovic, en la frontal del área, entra por detrás a Guti. Con el pie izquierdo da al balón y con el derecho clava los tacos en el tobillo del madridista, de mala forma. Iturralde señala la falta y Zokora le dice algo a Guti metiéndole la cabeza contra la frente de Guti, este se levanta para encararse con el marfileño que lo para agarrándole por la boca y nariz. En ese instante, Perotti le da una colleja por detrás a Guti que busca al argentino fuera de sí, siendo abrazado por Negredo (gracias Álvaro, has dado una muestra más que tu sitio es el Madrid).


Cámara, acción, Iturralde en su salsa. Su justicia es impartida, separa a los tres y, de forma teatral, como le gusta, les muestra cartulina amarilla a cada uno de los tres. No, Sr. Iturralde, Ud. no impartió justicia. La acción de Dragutinovic es merecedora de amarilla. La de Zokora roza más la roja, menosprecia por dos veces a un contrario, que la amarilla. Era reincidente, ya había tenido un gesto despectivo con Kaká que le recrimino el devolver la pelota junto al banderín de córner.

El que no tiene disculpa es Perotti. Su acción es una agresión en toda regla, da un manotazo en la cabeza de Guti, por detrás y de forma cobarde. Ya había simulado una lesión buscando evitar la contra madridista, cosa que logro al enviar la pelota Kaká fuera para que fuera atendido el argentino. La atención la puso él, presionando el saque de banda junto al banderín de córner, por donde Zokora había enviado el esférico en agradecimiento al favor de Kaká.


Esta es la copia del acta arbitral de Iturralde, que para más gloria a su actuación, falsea la misma, como se puede comprobar.

1.- JUGADORES

A.- AMONESTACIONES

- Sevilla F.C. SAD:

+ En el minuto 20 el jugador (10) Luis Fabiano Clemente fue amonestado por el siguiente motivo: derribar a un contrario.

Le faltó decir que derribó a Casillas con una patada en los huevos

+ En el minuto 35 el jugador (8) Didier Zokora fue amonestado por el siguiente motivo: discutir con un contrario, encarándose.

También se olvido de escribir que lo hizo por dos veces. Metiéndole la cabeza en la cara a Guti en la 1ª y agarrándolo por la boca y nariz la 2ª

+ En el minuto 35 el jugador (25) Diego Perotti fue amonestado por el siguiente motivo: discutir con un contrario, encarándose.

Perotti no discute con nadie, le da la colleja y escapa

+ En el minuto 60 el jugador (6) Adriano Correia Claro fue amonestado por el siguiente motivo: derribar a un contrario

Ya en el minuto 6 comete la misma acción, luego sería la 2ª amarilla y su expulsión

- Real Madrid C.F.:

+ En el minuto 18 el jugador (4) Sergio Ramos Garcia fue amonestado por el siguiente motivo: derribar a un contrario.

+ En el minuto 35 el jugador (14) Jose Maria Gutierrez Hernandez fue amonestado por el siguiente motivo: discutir con un contrario, encarándose.

+ En el minuto 70 el jugador (8) Ricardo Izecson Dos Santos Leite fue amonestado por el siguiente motivo: retener el balón, impidiendo el saque de un contrario.

Otro fallo grave del arbitraje, achacable más al asistente de ese lado, fue el permitir sacar los saques de esquina con el balón fuera del círculo, incluso unos 30 cm., varias veces. Errores en su labor hay más, dejo de señalar faltas existentes y pitó otras que no eran. Entre las primeras un agarrón sobre Sergio Ramos delante de sus narices.

Pero las dos más significativas fueron, la 1ª en el minuto 63, con tablas en el marcador, un centro de Guti (con la derecha) desde el pico del área, fue despejado, con las DOS manos, por Adriano dentro del área. Penalti muy claro que quedó en el limbo de los justos.

La 2ª fue en el minuto 73, dejando de señalar una clara falta de Pepe sobre Kanute que se quedaba franco para encarar portería rival. Era falta y rondaba la expulsión. Lo libra que estaba escorado hacia la banda derecha y Albiol estaba por el centro a su altura. Pero lo que si es falta y amonestación.

Que para la prensa, como ganó el Sevilla, que es lo que les interesaba, Iturralde tuvo una buena actuación. Y ahora yo pregunto ¿si hubiese ganado el Madrid y las acciones fueran desfavorables al Sevilla? ¿Cuáles serian los titulares de la prensa hoy? Yo mismo respondo Iturralde sería crucificado.

• La parte copiada literalmente del acta, la dejo sin corregir. El protésico dental comete bastantes faltas. En ortografía, lo mismo que arbitrando.

Nilo Campo
Socio Nº 89.506 del Real Madrid
Presidente Peña Madridista de Xove

Víctima de sus propios errores


En una liga como ésta, el Real Madrid no debe regalar puntos así si quiere aspirar a ser el campeón. ¿A qué me refiero con "una liga como ésta"? A que el Barcelona ya lleva seis puntos de regalo en concepto de ayudas arbitrales, en sus últimos dos enfrentamientos (Málaga y Almería). Si lo de la semana pasada fue grave, lo del sábado, con expulsiones perdonadas a Puyol y Alves, además de un claro penalti por mano no pitado a Márquez, empieza a rayar en la estupidez supina.

¿Estupidez de quién? De todos aquellos paletos que siguen diciendo que el Real Madrid es el único equipo que no puede quejarse de los árbitros. Claro, cuando Guti se lleva una tarjeta amarilla por sufrir una entrada por detrás de Dragutinovic, un fuerte y excesivo menosprecio de Zokora y una agresión de Perotti, es evidente que no podemos quejarnos. Eso sí, ni "Drago" se ha llevado una amarilla ni Perotti la roja que le correspondía. El que no quiera ver la realidad, así de tonto es. Sé que soy muy duro, pero como esta situación lleva ya varios años, no puedo por menos que pensar que en España la sociedad no piensa. ¿Culpable? La campaña periodística anti-Madrid, porque de otra manera, si alguien abriera los ojos a todos los tontos que no saben pensar por sí mismos, el Barcelona estaría en la posición de segundón que merece (hoy se ha llegado al colmo, ya que en varias televisiones públicas se ha recriminado que un futbolista del Almería hiciese un férreo marcaje sobre Xavi, vamos, que encima de los arbitrajes hay que dejarles vía libre para marcar).

En fin, vayamos al partido porque eso de que la gente piense por sí misma, me temo que nunca será propio de nuestro querido país.

Ya de entrada, ir a Nervión a jugar con diez me parece una barbaridad. Sí, lo habéis adivinado, hablo de Diarrá. No me lo podía creer cuando he oído a algún que otro periodista decir que ha hecho un partidazo. Si por partidazo entendemos tocar el balón en posiciones donde no se hace daño, llegar tarde a la presión la mitad de las veces y dar sólo dos pases buenos en todo el partido, entonces yo mismo, sin entrenar ni nada, soy capaz de jugar en el Real Madrid, porque para eso llego. Con uno menos en el centro del campo, Xabi Alonso no juega igual, lo que unido a que desde que salió de la lesión le está costando mucho volver a encontrar el ritmo de juego, hace que siga demandando una salida más que rápida de Diarrá del Real Madrid. Pero claro, esos periodistas que tanto nos quieren a buen seguro que preferirán ver a este zoquete como no escudero de Xabi que a Lass.

El partido se presentaba igualado. El Sevilla trataba de presionar al Real Madrid por el centro y de hacer daño por las bandas. Pero el Real Madrid, contra todo pronóstico, se sacudía la presión local con buen fútbol, toque de balón a la primera y un Guti como verdadero mariscal de campo, dirigiendo los designios del equipo.

El Sevilla no tenía claridad y el Real Madrid iba a más conforme avanzaban los minutos, hasta que hemos llegado a la fatídica jugada del primer gol. El error que ha cometido Marcelo es imperdonable hasta en infantiles. Recuerdo que por esperar un balón en lugar de ir a por él (que es lo que ha hecho esta noche el lateral brasileño) me llevé tal bronca de mi primer entrenador de infantiles, que nunca jamás he esperado el esférico en un campo de fútbol, bajo ninguna circunstancia. Marcelo estaba con Navas, pero mientras el Sevilla profundizaba por banda izquierda, ha ido perdiendo su referencia al fijarse sólo en el balón. Así las cosas, para Navas ha sido muy fácil robar la cartera al defensa blanco y adelantar a su equipo.

El Real Madrid debía remontar y aquí es donde el Sevilla juega a lo que sabe: marrullería, maldad, total falta de ética... En resumidas cuentas, acciones propias de un equipo asqueroso, que es realmente lo que son. Ya estábamos un tanto mosqueados con una acción de Perroti (vaya noche ha llevado el amigo) en la que ha fingido una lesión cuando Kaká se iba en contraataque. Tal es así que Iturralde no había parado el juego. Pero Kaká es un tipo de moral intachable y, a pesar de que el contragolpe era claro y muy peligroso, ha preferido parar y tirar el balón fuera. En el subsiguiente saque de banda, el Sevilla ha ganado metros enviando el esférico cerca del córner y se ha puesto a presionar la salida del balón. Kaká, con toda la razón del mundo, se ha enfadado y Zokora (el otro tonto muy tonto) se le ha puesto chulo.

Luego ha llegado el rifi-rafe con Guti, tras la entrada por detrás que ha sufrido por parte de Dragutinovic. Zokora se ha ido a por él (vaya usted a saber por qué, ya que la entrada ha sido tan dura como clara) y, aprovechando la confusión, Perroti (tan cobarde como asqueroso) ha agredido al 14 por la espalda. El árbitro lo ha solucionado con amarillas a Guti, Zokora y Perroti, para quedar bien de cara a la galería, pero lo que procedía eran amarillas para Zokora y "Drago" y roja para Perroti. Guti no merecía sanción alguna.

Con el Real Madrid desquiciado, a punto ha estado de llegar en los últimos minutos el 2-0, pero Casillas era hoy más santo que nunca y nos ha regalado dos paradones imposibles: uno el que acabo de mencionar y otro nada más comenzar la segunda mitad.

El Real Madrid necesitaba volver a la senda del buen juego. En ataque sólo Raúl se movía (lo siento en el alma, pero a Benzemá se le debe exigir muchísimo más, ya que hoy sólo se ha limitado a fallar un gol que Raúl le ha regalado en la primera parte). El problema es que el capitán ha ido de más a menos y hoy Kaká y Benzemá no tenían el día. Tampoco teníamos bandas, ya que Marcelo ha subido muy poco y Ramos, cuando lo ha hecho, no contaba con apoyos.

Cuando más parecía que estábamos sufriendo, ha llegado el empate. Falta botada magistralmente por Guti y cabezazo inmisericorde de Pepe al fondo de la red.

Con el gol el Sevilla se ha encogido. Alonso ha parecido despertar, Guti volvía a estar sereno y Kaká intervenía de forma menos intermitente que en la primera mitad. El Real Madrid comenzaba a dar sensación de peligro y, cuando más felices nos las prometíamos, otro error garrafal en defensa (hemos permitido un remate franco, en jugada a balón parado, dentro del área) nos ha vuelto a poner en desventaja.

No puede ser que tengamos al mejor portero del mundo haciendo milagros y que la defensa no tenga la tensión necesaria. Hemos visto todo el partido acciones en las que los delanteros hispalenses ganaban la espalda a Pepe y a Albiol. De Marcelo ni hablo, ya que ha hecho internacional al piscinero Navas. De hecho, Ramos ha sido el que más serio ha estado de todos en tareas defensivas.

Pellegrini ha tratado de reaccionar con cambios. Van der Vaart ha sustituido a Diarrá (a partir de ahí ya ha sido un once contra once), Higuaín a Benzemá (el argentino ha hecho poco, pero aún así ha sido mucho más de lo que ha hecho el francés) y Granero a Guti. El equipo no le perdía la cara al partido, pero las ocasiones de gol no eran claras, mientras que el Sevilla daba sensación de poder matar el partido en cualquier contragolpe.

Así hasta el último minuto. En la última jugada del partido hemos creído que llegaba otro milagro Higuaín: el argentino se ha hecho con el balón en la banda, a la altura de la medular; ha encarado a un rival (muy valiente, como siempre) lo ha regateado y ha centrado a Kaká con espacios y mucha ventaja; la jugada ha terminado con pase a Ramos y chut desviado de éste, que bien podía haber significado el empate.

Después de meditar sobre todo lo visto esta noche, la sensación amarga que nos queda es la de que hemos entregado el partido. Habíamos empezado jugando muy bien, con pases rápidos y precisos, sacudiéndonos con categoría la presión local. Los goles del Sevilla han llegado como demérito nuestro (sin la torpeza defensiva mostrada no habrían llegado a marcar un solo tanto) y nuestros bajones de juego han coincidido con los goles encajados. Es decir: un partido que, a pesar de la dificultad añadida de un arbitraje casero, nos habríamos llevado sin Cristiano ni Lass y con un Xabi Alonso que todavía no parece recuperar el ritmo de juego que poseía antes de su lesión.

Decepción por la derrota, pero, afortunadamente, parece que estamos creciendo como equipo (al menos es la sensación que hemos dado durante muchos minutos de la primera mitad). Hay que seguir mejorando (sobre todo en defensa, ¡¡¡CUÁNTO TE ECHO DE MENOS, CANNAVARO!!!) y confiar en que todo siga su curso.

domingo, 4 de octubre de 2009

Mal inicio en baloncesto


Todavía estoy mosqueado por lo que vi, ayer tarde, en el partido que enfrentó al Real Madrid contra el Regal Barcelona (nos tienen tanta envidia que hasta la propaganda es "casi real") para dirimir la Supercopa de baloncesto.

Son varias cosas las que me tienen frito, las cuales se pueden resumir en dos: plantilla y árbitros. Vayamos recapitulando.

A falta de 17 segundos para el final del encuentro, el jugador más sobrevalorado en la historia del baloncesto español (y que ayer las enchufaba todas) Juan Carlos Navarro, disponía de dos tiros libres para sentenciar el choque a su favor (el Real Madrid perdía por dos puntos). Pero he aquí que Navarro falló los dos lanzamientos (vamos, que comenzó a fallar en el momento crucial) y el Real Madrid se hizo con el rebote. Faltaban 17 segundos, por lo que se podía efectuar un ataque en toda regla. Las opciones debían ser dos: buscar la prórroga con canasta interior de Garbajosa (creo que era lo más sensato) o intentar resolver con un triple del gran Bullock (teniendo en cuenta que ayer no fue su día, era un riesgo).

Pero no contábamos con que el base del equipo era Prigioni. Para entender cómo es este baloncestista, baste decir que es la prolongación de Makelelé en una cancha de baloncesto, a saber: muy buen defensor, pero un auténtico inútil a la hora de pasar el balón. La bola no le duró al Real Madrid ni cinco segundos, ya que este zopenco (y Raúl López en Rusia...) la regaló de forma lamentablemente torpe a los rivales, que sentenciaron con un contraataque sin oposición.

Mucho tardó el entrenador del Regal Barcelona en darse cuenta, pero al final del tercer cuarto entendió que si cerraba a Prigioni la posibilidad de conectar con el poste alto, el base madridista no sabía qué hacer con el balón. Recuerdo la época en la que se acusaba a José Miguel Antúnez de no saber leer un ataque. Evidentemente Antúnez no era Corbalán ni Llorente, pero al menos sabía esperar a que Sabonish se situara para entregarle el balón, cosa que no se puede pedir a este inútil de Prigioni (lo siento, pero fui base muchos años y lo de este tío es para enervar a cualquiera). A partir de ahí las pérdidas de posesión madridistas causadas por la incompetencia de Prigioni para dirigir el ataque y las ayuditas arbitrales (cuatro consecutivas en forma de dos personales inventadas, unos pasos no pitados y un tremendo zarpazo sobre Reyes sin castigo) consiguieron que los diez puntos de ventaja con que el Real Madrid gozaba al final del tercer cuarto se redujeran a la mínima expresión: cero.

El partido jamás debió haber llegado a los últimos minutos con los guarismos igualados, ya que el Real Madrid se mostró mejor que los azulgrana, a pesar de que parecían tener lo que vulgarmente se conoce como "una flor en el culo", ya que consiguieron varios triples desde ocho metros o más en el último segundo de posesión y tirando casi sin mirar.

Pero llegó uno de los grandes problemas de nuestro equipo: la Reyes-dependencia. En ataque tenemos juego interior, ya que Garbajosa, ofensivamente, sigue siendo un pívot de mucha calidad (y no me refiero a su buen tiro exterior, sino a esos movimientos de espaldas al aro que tan bien ejecuta). Pero en defensa, el único que da equilibrio es Reyes. Los minutos en los que el pívot no estuvo en cancha, el Barcelona se hartó a coger rebotes en ataque. Desconozco si contamos con más hombres altos de los que ayer puso Messina en liza, pero más vale, porque sólo con Reyes no podemos optar a los grandes títulos.

Muchas veces he comentado que, en fútbol, un árbitro te puede hacer la Pascua de mil maneras: cortando contraataques pitando faltas inexistentes en el centro del campo, no concediendo leyes de la ventaja, equivocándose en un saque de banda que montaría un peligroso contraataque, poniendo tarjetas amarillas o perdonando otras en lugares remotos del campo... Pues en baloncesto, esa labor oscura para ir minando la resistencia de un equipo se puede hacer mucho más descarada. Dos de las cuatro faltas personales pitadas a Felipe Reyes fueron un auténtico invento. Una se la pitaron en los primeros momentos, cuando se supone que no pasa nada, pero claro, con el desgaste que Felipe debe hacer dada la incompetencia del resto para rebotear en defensa, cualquier falta extra motiva que deba sentarse en el banquillo. También sucedió con Bullock, que tuvo exceso de banquillo por obra y gracia arbitral (y lo padecimos con Prigioni en el campo).

Lo del arbitraje en baloncesto es tan vergonzoso como en fútbol. Los paralelismos están claros: al Barcelona sólo se le pitará una de cada cinco faltas que cometa en ataque (igual que con las tarjetas amarillas en el balompié) y nunca jamás se le pitarán pasos, aunque éstos sean suficientes como para recorrer el camino de Santiago (es decir, como las rojas a Dany Alves, Puyol, Piqué y demás terroristas azulgranas). Así es mucho más fácil, ¿verdad?.

En fin, que estoy mosqueado. Tenemos un base sin visión de juego, sólo tenemos un pívot para defender y así las cosas, dependemos en exceso del acierto de nuestros tiradores (al menos de eso tenemos en abundancia).

Plantilla descompensada. A menos que don José Martínez me informe de que contamos con más jugadores que los de ayer, con esto no basta. ¿No íbamos, por fin, a cerrar la larga y negra racha del basket? De momento vamos por mal camino. Veremos cómo acaba.

sábado, 3 de octubre de 2009

Sevilla-Real Madrid: Iturralde González

Quiero comenzar este informe haciendo referencia a la entrada de Drenthe al jugador del Tenerife, Marc Bertrán. En la crónica sobre la actuación de Muñiz Fernández, no comenté nada sobre la misma debido a que, si bien la entrada es muy fuerte y a destiempo, a primera vista entendí que, como estaba el listón, la cartulina amarilla que vió el holandés era justa. La lesión que acarreó la misma nos hace pensar que Muñiz se equivoco y debió expulsar al jugador madridista.


Centrémonos en el “personaje” designado para dirigir el encuentro Sevilla – Real Madrid. A priori, este partido, es uno de los grandes de la temporada y a la R.F.E.F., por mediación de su Comité de Designación Arbitral (los Ilustres anti-madridistas confesos: D. Victorino Sánchez Arminio, D. Antonio Jesús López Nieto y D. Evaristo Puentes Leira) no se le ocurre un colegiado mejor que Eduardo ITURRALDE GONZÁLEZ para dicho evento. Dios nos coja confesados.

Nació, dicho personaje, un 20 de febrero de 1967 en Bilbao y criado en Llodio, de profesión protésico dental (algo tenía que tener relacionado con la cara que tiene) e hijo-nieto de árbitros. Su abuelo tiene el “merito” de haber sido el árbitro con el que más derrotas sufrió el Real Madrid en su casa. Su nieto le sigue muy de cerca.

Arbitra en primera división desde la temporada 95/96 y es árbitro FIFA desde 1998. Su debut en la máxima categoría fue el 3 de septiembre de 1995 en un Español 3 – Salamanca 1. Lleva, por consiguiente, 15 temporadas con la actual y 242 partidos de liga. En nuestra memoria solamente hay recuerdo de escándalos en uno si y otro también. Tiene lo peor que puede tener un colegiado: “afán de protagonismo”.

En 122 ocasiones vencieron los locales, 61 los visitantes y en 59 terminaron en tablas. Mostró 1274 cartulinas amarillas y 105 rojas.

Ha participado en Mundiales y Europeos de categorías inferiores, ha dirigido encuentros de Champions League, UEFA e Intertoto, arbitró una final de Copa del Rey y varios derbis Real Madrid-F.C. Barcelona. Incluso dirigió un partido de máxima rivalidad en Irán, entre el Persépolis y el Steghlal, asistido en una de las bandas por el ínclito Rafael Guerrero.


La temporada anterior quedó en noveno lugar, con un promedio 1.5, para el trofeo Guruzeta, trofeo que logró en la temporada 2001/2002. En la clasificación de la RFEF quedó 5º, con una valoración de 9,71.

Centrándonos en su labor con los dos contendientes, se nos viene a la memoria una semifinal de Copa del Rey del 2004, en el mismo escenario que el de mañana, en el cual permitió toda la violencia, habida y por haber, de los Alfaro, Javi Navarro y Cia, alumnos de Caparros y que permitiera continuar el juego en el área madridista con varias bengalas ardiendo en la misma, lo que dio lugar al gol sevillista.

Redondeó su actuación con la expulsión de Zidanne, aunque al final y, tras haber protagonizado Valdano una “visita” a su vestuario en el descanso (llenó la misma cientos de páginas) bien es cierto que al final expulsó a Javi Navarro, merecidamente, y que el Madrid logro superar la eliminatoria.

A los nervionenses, su designación no les cayó nada bien, aunque las dos últimas temporadas con él les fue de maravilla. De los 21 partidos que los dirigió, ganó 8, empató 3 y perdió 10. Como local, 11 encuentros, 7 ganados y 4 perdidos y amonesto en 37 ocasiones a los sevillistas y 39 a los visitantes. Expulsó a dos locales y a tres visitantes. Les señaló dos penaltis a favor y cuatro en contra.

Con respecto a los madridistas, los dirigió en 33 ocasiones, de las cuales 13 como visitante, con un balance de 6 victorias, 3 empates y 4 derrotas. Vieron 30 tarjetas amarillas y 3 rojas. En cuanto a penaltis señalados, hay empate a tres. Tres a favor y tres en contra.

Solamente desearle suerte, porque de su aciertos o de sus errores va a depender mucho el espectáculo que todos deseamos ante un evento de estas características. Espero que el lunes, cuando plasme su actuación en el blog, no tenga que añadirla al vídeo que circula por YouTube y del cual podemos ver una parte en este enlace

Nilo Campo
Socio Nº 89506 del R. Madrid
Presidente de la Peña Madridista de Xove (Lugo)

viernes, 2 de octubre de 2009

NOS LA DEBÍAN


Tras escuchar atónito que Río de Janeiro será la ciudad que albergue los Juegos Olímpicos de 2016, he empezado a hacer memoria sobre lo ocurrido en la anterior elección y, ciertamente, nos la debían. Supongo que no habrá caído en el olvido la jugada de Alberto de Mónaco, aprovechándose vilmente de un atentado terrorista para desmerecer nuestra candidatura, así como ciertas irregularidades de algún que otro miembro del jurado que, "supuestamente", se equivocó al pulsar el botón de turno.

Este año lo hemos vuelto a intentar y, tras lo visto, queda fuera de toda duda que Madrid era, con diferencia la mejor: infraestructuras, clamor popular, experiencia... Lo teníamos todo. Sin embargo Brasil ha conseguido que gane el chantaje emocional, ya que la única baza sólida con la que contaban era la de que nunca se ha celebrado una Olimpiada en Latinoamérica.

Madrid ya contaba con la infraestructura, mientras que Brasil lo tiene que construir prácticamente todo, así que me quedo con una frase de Coral Bistuer: "En el deporte no siempre gana el que mejor preparado está; hoy ha sido un claro ejemplo".

jueves, 1 de octubre de 2009

Un equipo temible


Voy a empezar rompiendo una lanza en favor de nuestro equipo, ya que pienso que muchos medios de comunicación están tratando de distorsionar la realidad, simplemente, porque tienen auténtico pavor a que llegue el día en que nos enfrentemos al FC Barcelona.

Resulta que jugamos mal, que nuestro fútbol es malo y poco vistoso, que nos cuesta sacar adelante los partidos... Vamos, que no jugamos a nada, que somos un desastre total peor que el Titanic. Y digo yo, ¿pensarán esto el Olympique, el Tenerife, el Deportivo, el Zurich, el Villarreal...? Resulta que el Real Madrid es el único equipo de todo el planeta que cuenta todos sus partidos oficiales por victorias. Resulta que somos el equipo que más goles marca y el que menos encaja. Resulta que Villarreal y Deportivo son dos equipos importantes de la liga española, que el Tenerife es bastante correoso porque practica una presión asfixiante a sus rivales, que el Zurich ganó ayer al Milán en Italia (así que no serán mancos, cojos ni tuertos) y el Olympique es el mejor equipo francés de la actualidad. Y les hemos ganado a todos.

Es cierto que al Real Madrid se le atraganta que el rival adelante líneas y mantenga una incansable presión, pero he ahí el quid de la cuestión: nadie es incansable (salvo quizás Induráin o algún maratoniano de estos que entran como aquel que ha estado paseando en una tarde de asueto). El Real Madrid no marcó en los primeros 45 minutos en sus dos últimos partidos. La causa fue el impresionante desgaste físico de sus rivales, además de su magnífico orden táctico y su cuidado estudio del partido. Pero es inhumano aguantar así 90 minutos, así que en ambas ocasiones, el Real Madrid dio un zarpazo de tres goles y ¡Hasta luego, Lucas!.

Reconozco que, por el momento, nos cuesta salir de la presión. Pero mantenemos la portería a cero mientras el rival se va desgastando. No es una táctica con la que debamos vivir siempre, aunque de momento funciona. Y es que tenemos la mejor pegada del mundo. ¿Qué pasó ayer, cuando no conseguíamos llegar con claridad al área francesa? Dos zambombazos lejanos de Cristiano, dos auténticos cañonazos que metieron el miedo en el cuerpo y de qué forma, a nuestros vecinos franceses. La pena es que no hubiera estado Raúl en el campo, ya que es el número uno para hacerse con los rechaces del portero. Tras los dos trallazos, llegaron otras dos ocasiones de gol de Benzemá, la primera muy difícil, de chilena, la segunda falló un gol cantado en un mano a mano con el portero. Y eso en la primera parte, que fue cuando peor se jugó y cuando más críticas recibió el equipo.

Hablando de Benzemá: ¿alguien le va a explicar a este chico en qué consiste buscar el desmarque y el apoyo al compañero? Fui uno de los defensores de este fichaje, no me escondo, pero eso no es óbice como para criticar lo que no me gusta. Benzemá se está pareciendo cada vez más a Ronaldo (el gordo, no CR9): si tiene campo por delante para correr, entonces se desmarca, pero si no, se queda quietecito. En un partido como el de ayer, los centrocampistas necesitan apoyos para superar la barrera del centro del campo. Hablamos del consabido concepto de superioridad numérica para salir de la presión. Dicha superioridad puede establecerse en la medular, para intentar salir entre líneas o en las bandas, pero para eso los delanteros deben moverse (algún día se reconocerá lo grande que es Raúl, digo yo). En fin, ya veremos pero, de momento, sigo pensando que Negredo es superior a Benzemá. Espero que con el paso de las jornadas alguien meta en cintura al atacante francés, porque Kaká, Cristiano y Guti necesitan que los que están por delante se desmarquen para poder pasarles el balón.

En el centro del campo Xabi tuvo sus altibajos (creo que todavía no ha recuperado la forma tras la lesión) y Gago se dedicó a tareas defensivas. Kaká intervino poco en la primera parte, aunque en la segunda supo aprovechar cada hueco que se le presentó. Guti, como viene siendo habitual, fue el mariscal de campo, tratando de repartir juego. Marcelo y Ramos apoyaban las bandas, pero sin continuidad. Como Benzemá tampoco se dejaba caer por allí, la primera mitad tuvimos cerrada esa salida, de tal manera que cada vez que recibía Cristiano, tenía hasta a tres rivales encima y así es muy difícil.

El caso es que en la segunda parte cambió el panorama. Pepe recordó al mejor Fernando Hierro con un pase impresionante (fijáos en lo poco que bota el balón al botar, tras venir de una distancia de más de cuarenta metros, digno de un superclase) Cristiano desbordó por velocidad y, con toda la tranquilidad del mundo, batió al meta francés por bajo.

Poco después un animal (no se me ocurre otro nombre) casi destroza a CR9 en una entrada completamente desmedida dentro del área: penalti y expulsión por segunda amarilla. Kaká, tan tranquilo como Cristiano en su primer gol, anotó el segundo.

Y, ¿qué me decís de el tercer gol? El Real Madrid hizo encaje de bolillos: Guti, Kaká y Benzemá volvieron loca a la defensa francesa para que Cristiano terminase anotando a placer el tercero de la noche y el segundo en su cuenta particular (¿no decía la prensa que está ansioso, enfadado y no sé cuantas cosas más?).
Se lesionó Cristiano (espero que sea poca cosa, al menos esa fue la impresión). Entró Higuaín y dispuso de dos claras ocasiones, además de un nuevo penalti que el árbitro no se atrevió a pitar. Entró Raúl y regaló un gol a Guti que, extrañamente, no supo materializar (a lo mejor fue su único fallo de toda la noche). Vamos, que el Olympique todavía tiene que dar gracias por no irse con una gran goleada, a pesar del despliegue físico y táctico que realizó todo el encuentro.

Líderes en la liga, líderes en la Champions y eso que jugamos mal y todo lo demás. No creo que el Olympique piense que somos un equipo del montón, eso os lo aseguro. Ciertamente hay que mejorar varios aspectos, pero es que sólo llevamos un mes de competición y muchos de estos chicos nunca habían jugado juntos. Poco a poco el Real Madrid hilvanará más jugadas como la del tercer gol, apoyará más al futbolista que lleva el balón, las líneas estarán más juntas porque todos conocerán los movimientos de sus compañeros, lo que provocará, indefectiblemente, que se juegue al primer toque y, así, estoy seguro de que no tendremos que esperar a las segundas partes para ver goles.

¿Qué queréis que os diga? Creo que todo pinta bastante bien para la consecución de la décima. ¡Hala Madrid!

El Real Madrid ve las orejas al lobo

El Real Madrid empata a 2 contra el Valencia,  en la segunda jornada de liga, en el primer partido  de esta temporada disputado e...