
Ángel la vió en el minuto 70 por el penalti cometido y que, en el colmo de la desfachatez, protestaron los jugadores locales y Ángel más, si cabe. Tendría que haber visto la 2ª cartulina amarilla y dejar a su equipo con nueve jugadores. En el minuto 73, nuevamente Ángel comete una clara falta sobre Kaká, al que derribo cuando encaraba a Diego López. Mejuto, diplomático él y, para no hurgar más en la herida del submarino amarillo, dejo seguir el juego.
También fue tan protestada, como justa, la expulsión de Gonzalo, al ver la correspondiente tarjeta amarilla, por la patada en el pecho a Kaká, por detrás. Era la 2ª y se tenía que ir a los vestuarios en el minuto 34 cuando la realidad es que ya tendría que haber sido expulsado en el minuto 12. Su entrada sobre CR9 era merecedora de cartulina roja directa.
Otro que debió ser expulsado en el minuto 62 fue Eguren. Si en la primera parte le permitió la reiteración de faltas, en el minuto 62 le perdono un agarrón que significaba ser amonestado por cortar la contra rival.
Resumiendo, en el apartado disciplinario estuvo muy contemplativo y no quiso que la prensa “amiga” cargara las tintas sobre su arbitraje y desviara la atención de la superioridad madridista sobre los locales a los que, seguramente, habría terminado goleando ampliamente ante la superioridad numérica y de juego.
Hacer mención, también, que en el minuto 30 Gonzalo agarro dentro del área a Marcelo pero ni Mejuto, ni su asistente, vieron o no quisieron verlo (era difícil, la verdad). Lo que si vieron fue la posterior de Marcelo a Gonzalo, pasando de un penalti a favor madridista a una falta en contra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario